El sobrepeso y la obesidad en los niños de edad escolar se ha duplicado en muchos países en las últimas décadas. El incremento de peso de grasa en el cuerpo está asociado a la falta de actividad física y ejercicio, así como a los malos hábitos alimenticios, que incluye la ingesta de azucares y comida chatarra.
La televisión, los videojuegos, la computadora, los modernos teléfonos celulares, el Internet, la transportación motorizada etc., contribuyen negativamente en la condición física de los niños.
En los Estados Unidos de Norte América, según la “American Heart Association”, cerca de 45% de los niños presentan factores de riesgo de enfermedades del corazón (obesidad, triglicéridos y colesterol alto, hipertensión arterial y sedentarismo).
El incremento de la actividad física y el ejercicio moderado está ligado a una amplia serie de ventajas saludables, físicas y mentales.
Los niños involucrados en programas de ejercicio moderado ganan mejor los grados y tienen mejores habilidades sociales que aquellos que no lo realizan.
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El 85 % de los niños de cinco años en los Estados Unidos de Norte América no es capaz de superar una prueba simple de condición física.
Los niños y adolescentes que miran a sus padres efectuar actividades físicas y de ejercitación, tienen más posibilidades de desarrollar un estilo de vida saludable, que aquellos que no reciben ese ejemplo.
Un programa de acondicionamiento físico diseñado especialmente para niños, que involucre ejercicios cardiovasculares (aerobico) de fortalecimiento muscular y de flexibilidad, les ayudará a mejorar su condición física, autoestima, a conocer mejor su cuerpo, aprender la importancia de una buena salud y tendrán además mucha diversión.
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