El sedentarismo se define como la falta de actividad física regular y la actividad física se define como cualquier función corporal en la cual participan los músculos esqueléticos, dicho de otra manera, en la que participan las células musculares que conforman el tejido muscular voluntario o estriado.
Actualmente, diversos estudios realizados en varios países, concluyen que el sedentarismo se relaciona con el doble de defunciones que las que provoca la obesidad, en otras palabras, significa que aunque usted tenga sobrepeso u obesidad, si se mantiene en movimiento tendrá menos posibilidades de enfermarse y/o morir.
La organización mundial de la salud (OMS) menciona que al menos 60% de la población mundial, no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud. La falta de actividad física es un problema de salud publica mundial, tanto en países desarrollados como no desarrollados. Se considera que existen varios factores ambientales que desalienta la actividad física, entre los que se encuentran:
1.Super población
2.Aumento de la pobreza
3.Aumento de la criminalidad
4.Gran intensidad de trafico
5.Mala calidad del aire
6.Inexistencia de parques, aceras e instalaciones recreativas.
La falta de actividad física se relaciona con enfermedades como: diabetes, hipertensión arterial, enfermedad coronaria, infartos al miocardio, accidentes cerebrovasculares, cáncer de mama, de próstata, de colon, depresión y muchas más. Es importante tener este concepto claro, pues aunque una persona tenga un peso corporal dentro de límites deseables, la falta de actividad física es un factor de riesgo por sí mismo. Por supuesto, si le agregamos una dieta rica en grasas animales, pobre en frutas y verduras, abuso del alcohol, tabaquismo y el sobrepeso, los factores de riesgo se multiplicarán.
Cuando hablamos de actividad física nos referimos a cualquier movimiento que la persona realiza en su diario vivir, como levantarse de la cama, lavarse la cara, peinarse, caminar al trabajo, sentarse y pararse frecuentemente, bueno hasta parpadear, sin olvidarnos de una actividad física que pasa inadvertida, el respirar; porque en todas estas funciones participan las células musculares esqueléticas.
Como puede darse cuenta no estamos hablando de ejercicio ni de deporte. Por cierto, se considera que realizar actividad física de manera regular es más efectivo para mantener el peso corporal deseable, que una hora de ejercicio, eso no significa que sustituya al ejercicio, porque el ejercicio es vital para mejorar las funciones cardiovasculorespiratorias, la fuerza y la resistencia muscular y por supuesto la flexibilidad, a través de los tres tipos de ejercicio correspondientes.
Si usted quiere saber si es sedentario analice cuantos minutos utiliza sentado para comer en el día, cuantos minutos u horas está sentado en su vehículo, en el bus o cualquier medio de transporte hacia el trabajo, cuánto tiempo está sentado en su oficina, viendo televisión, escuchando música etc., si al final encontró que utiliza al menos 6 horas de su día, es una persona sedentaria y es el momento de hacer algo al respecto, en otras palabras, moverse más.
Si desea cuantificar cuanto se mueve, existen actualmente pequeños aparatos o dispositivos denominados podómetros que detectan los movimientos que se realizan diariamente; algunos le informan de cuantos pasos fueron efectuados en el día y otros a los pasos le agregan los movimientos de sus miembros superiores, toda la información inclusive puede ser transferida a una Tablet, computadora o teléfono celular, para que con esa información determinar si está efectuando la actividad física necesaria.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sugerido para los niños y adolescentes al menos una hora diaria de movimiento continuo, además de la ejercitación y la práctica de alguna actividad física recreativa deportiva. Para los adultos de 18 a 64 años se aconseja orientar sus periodos de ocio a actividades que involucren movimiento, como tareas domésticas, jardinería, paseos por el parque, o en el campo etc. Para los mayores de 65 años las recomendaciones de actividad física son similares a las del grupo anterior. Para estos dos últimos grupos de personas es recomendable tener en consideración su estado de condición física y si posible efectuar una evaluación previa a la actividad física sugerida, así como para la prescripción de la ejercitación.
En conclusión, muévase lo más que pueda, dentro de su oficina levántese cada hora estire sus músculos y realice algunos movimientos, como levantar los brazos repetidamente, realizar pasos de baile, utilice las gradas, en lugar del ascensor, camine cada vez que le sea posible, realice tareas domésticas, jardinería, los fines de semana o en su tiempo libre efectúe caminatas, nade, baile, en fin cualquier actividad que involucre movimiento.
Con este artículo espero haber despertado en nuestros lectores la inquietud sobre este tema tan importante, para contribuir a conservar el presente y futuro de lo más preciado que tenemos, la salud.